Os traigo unas fotos que me ha enviado una amiga. Gordiko, a la que cariñosamente llamamos Gordi, ha estado de vacaciones por el Loira y la Bretaña francesa y no ha perdido la oportunidad de darme envidia con su viaje.
En el Loira ha disfrutado mucho viendo toda clase de castillos. Aquí la podemos ver de visita en el Château Chambord.
Tanto le han gustado los castillos franceses que me ha contado que ha adquirido uno. Dice que, ahora, el Château Chenonceau es su "casita" de verano. El castillo no se ve muy claro, pero bueno, creo que nos podemos hacer una idea
Aunque a mi no me engaña porque se le ha colado esta otra foto. Creo que este es su verdadero "castillo" (si os fijáis bien, Gordi está sobre la tienda)
No todo han sido castillos, también ha pasado tiempo en la playa, el problema era que el agua estaba ¡helada! y que la primera vez que metió los pies tuvo que salir corriendo.
Eso sí, las vistas desde los antiguos bunkers alemanes en la península de Crozón Penhir deben ser una maravilla a juzgar por la foto...
También fue a visitar el Mont Saint Michel, le gustó mucho, pero el arcangel debió engañarla. Gordi estaba enfadada por que el arcángel le pidió que le sustituyera un ratito en la torre, que tenía que hacer un pis y la dejó allí durante ¡dos horas! pobre...No se puede fiar una ni de los ángeles...
Pero no hay nada que no pueda curar un buen dulce. Se puso las botas con un Kuing Amman y un Far Breton, pasteles típicos de la zona. Me dijo que estaban para chuparse los dedos.
Con un buen sabor de boca, pero pocas ganas de que acabasen las vacaciones, carretera y manta hacia Bilbao.
Eso sí, nunca sale de viaje sin provisiones para comer durante el camino. ¿Se habrá comido todo el bocata?